miércoles, 16 de abril de 2014

Bryan Singer y X-Men


La vuelta de Bryan Singer como director, a la saga de X-Men es preocupante, ya que dejó mucho que desear con las dos primeras entregas.  La saga comenzó a mejorar con la tercera entrega, esto gracias a que Singer estaba ocupado dirigiendo la terrible Superman Returns; por lo que fue reemplazado por Brett Ratner (Rush Hour, Red Dragon), dejando a Singer a cargo de la producción.  La siguiente entrega X-Men: First Class, que a mi parecer es la mejor hasta ahora, estuvo bajo la dirección de Matthew Vaughn (Stardust, Kick-Ass) y Bryan Singer nuevamente en la producción.




En mi opinión, Bryan Singer no es un mal director, ya que todas sus películas que no han sido adaptaciones de cómics han sido buenas; como Los Sospechosos de Siempre (The Usual Suspects) y Operación Valquiria (Valquiria).  Por lo tanto, la última película de X-Men será una carga muy fuerte y una gran responsabilidad para Bryan Singer



Raúl Carchi Andía ©

viernes, 4 de abril de 2014

El Noé de Aronofsky



No comprendo el porqué de la polémica que ha causado la película Noé de Darren Aronofsky.  El propio Aronofsky ha dicho que las películas bíblicas siempre han causado dicha respuesta en cierto sector del público, como fue el caso de Los Diez Mandamientos.


Es un cambio radical de género para Aronofsky, si tomamos en cuenta que ha sido responsable de trabajos tales como Requiem por un Sueño (Requiem for a Dream) y El Cisne Negro (Black Swan).


Esta película nos presenta a un Noé mucho más humano, con sus errores y virtudes. Sin lugar a dudas, Noé es una propuesta más real y el guión co-escrito por el mismo Aronofsky; que aunque su idea central está basada en las antiguas escrituras, le brinda lógica a muchas inquietudes y llena muchos espacios en blanco que posee su fuente de origen; sumado a una  gran cantidad de efectos visuales, escenas un tanto crudas y hasta un poco de acción.



En mi opinión, la película fue realizada con el fin de entretener a personas de diversas creencias y no tiene el fin de profetizar; ni tampoco presentarse como una verdad absoluta, por lo que no debe causar disgusto respecto a temas religiosos.



Raúl Carchi Andía ©

miércoles, 2 de abril de 2014

Un fenómeno llamado Tarantino



Mucho se ha hablado de la sobrevaloración de Quentin Tarantino, pero para entenderlo mejor, debemos realizar un viaje entre las décadas de 1970 y 1980, época en que los famosos autocines y salas grindhouse estaban en boga en los Estados Unidos. 

Tarantino es un fanático acérrimo del género no oficial e informalmente llamado explotación.  Las películas de este género carecían de buenos guiones, debido a su bajo presupuesto; por lo tanto se concentraban en tratar temas sensacionalistas, presentados de manera exagerada y mórbida, para así asegurarse una taquilla respetable.




El mérito de Tarantino está en tomar esta influencia y transformarla en guiones de calidad, que han sido tomados en cuenta en numerosos festivales de cine; incluyendo los premios Óscar.



Raúl Carchi Andía ©