sábado, 9 de abril de 2016

“Kiki, el amor se hace”,

Al ver Kiki, el amor se hace, recordé la película Todo lo que usted siempre quiso saber sobre el sexo, pero nunca se atrevió a preguntar (Everything You Always Wanted to Know About Sex, But Were Afraid to Ask) de Woody Allen.  En la actualidad, Kiki no resulta tan atrevida como lo fue en su época la película de Allen.


La nueva película del director Paco León, en la cual también es uno de sus protagonistas, muestra sin tapujos los más profundos deseos y fetiches de un grupo de personas, en su mayoría mujeres.  Es una crítica a la opresión sexual aún existente, a los tabúes impuestos por la sociedad.


El plantear estos temas a manera de comedia es una estrategia para poder introducirlos de manera camuflada en una sociedad que aún no está lista para aceptarlos de manera abierta y a los cuatro vientos.

Lo negativo de la película es haberse enfocado en los fetiches sexuales de los personajes femeninos, dando cabida a tan solo un personaje del gremio masculino; no olvidemos que nosotros los hombres también contamos con nuestros fetiches, por lo tanto la película carece de igualdad, si tenemos en cuenta que es una película que puede ser disfrutada por ambos sexos.  En conclusión, la opresión sexual a la cual ataca la película se ve amenazada por la sexualidad femenina explotada, lo que conlleva a una crítica en su contra que pesa igual o más que la planteada por la cinta.


Raúl Carchi Andía ©

No hay comentarios.:

Publicar un comentario